Conservation Opportunity se unió junto a la organización sin fines de lucro, Olita para desarrollar una actividad de concientización ambiental con el fin de restaurar la playa de Rompeolas en Aguadilla en el 17 de julio de 2021.
El evento se llamó “El Rompeolas es del Barrio: Reunión de Arte y Siembra” ya que, en el mismo, con ayuda de habitantes de La Vía y Cerro Calero, se llevó a cabo una siembra de 100 árboles donados por la organización sin fines de lucro, Para La Naturaleza, y una agrupación de personas, liderados por el artista local Billy Joe con su taller, “Carabambú”, pintaron una yola abandonada.
La misma fue posicionada frente a una yola dejada por inmigrantes y a través de esta obra artística se espera honrar a aquellos inmigrantes Haitianos y Dominicanos que vienen a Puerto Rico en búsqueda de mejores vidas. Con este acto, se quiso tratar unificar la comunidad para embellecer el área y Billy Joe expresa sus sentimientos de gratificación con las siguientes palabras.
“Esto me impactó porque llevaba tiempo desde que los estudiantes no iban a cooperar así con la comunidad. Ya yo he ido a cooperar con diferentes organizaciones, como Olita, que son los niños ‘surfer’ y me gusta mucho conservar el ambiente. El primer día que fuimos a pintar la yola llegaron muchas personas de la comunidad a ayudarnos. Fuimos a recoger basura, y mira yo estuve dos días ahí pintando bajo el sol, pero me gustó la iniciativa que tuvieron para conservar las áreas,” cuenta Billy Joe, artista y líder del taller artístico Carabambú.
Entre los árboles sembrados, 30 fueron de Uva de playa (Coccoloba uvifera), 10 Almácigos (Bursera simaruba), 30 Marías (Calophyllum antillanum), 25 San Bartolomés (Cordia rickseckeri) y 5 de Gitarán (Dodonea vigorosa). Cabe destacar que, durante el evento, hubo alrededor de 51 participantes de las diferentes organizaciones y se pudo recoger 15 bolsas de basura luego de una limpieza del área.
Mediante la actividad, todas las entidades envueltas tenían su meta establecida de ayuda. Muchos de ellos consideran que otro evento como este puede promover mayor cooperación de la ciudadanía en cuanto a la protección del medio ambiente en el área de Rompeolas.
“En la medida que los barrios y la comunidad ve estos tipos de acción, pues primero ven algo distinto al día cotidiano. De un día monótono, ver a gente limpiando, sembrando y pintando pues cambia el día normal de ellos. Por consiguiente, al ver, se acercan, van preguntando y se unen, incluso tal vez ver un nuevo camino. Un dato común entre barrios es lo idéntico que se parecen los días que tal hace como un ciclo de lo cual los habitantes no puedan salir de la pobreza. En la medida que uno puede ofrecer nuevas oportunidades, pues precisamente se rompe con eso”, explica Gerardo Lebrón, fundador de Olita. Para Olita, su misión primordial es acabar con el ciclo de pobrezas en barrios y darles a ellos mejor vida en el pueblo de Aguadilla. Ellos nos explican como la colaboración de aquellos participantes “improvisados” dejan una huella en los proyectos, tal como el hombre que deambulaba que decidió ayudar a bajar plantas antes que hacer su rutina común.
Por otro lado, luego de evaluaciones de la localización de la siembra de los árboles, se estima que, de haber alguna tormenta, las posibilidades de un daño será el mínimo ya que no se encuentra muy cerca de la costa, si no en un humedal. “La estructura de la playa Rompeolas se hizo de forma artificial y siempre la erosión costera está ocurriendo. En ese lugar donde nosotros sembramos los árboles, quedaba un poco retirado de la costa como tal y más cerca del humedal. Entiendo que, si hay erosión por alguna tormenta o por alguna situación natural que ocurra en las playas, pues los árboles que más se van a ver afectados van a hacer las palmas que ya están ahí, cerca de la orilla. Estos arbolitos nuevos, entiendo que van a durar un tiempo y, de hecho, pueden ayudar a sostener ese terreno. Las raíces de los árboles pueden ayudar a sostener el terreno para evitar que siga erosionando,” dice Karlyn Grafals, Intérprete Ambiental de la Región Oeste de Para La Naturaleza.
Luego de esta actividad de cierre de verano, se consideró un éxito rotundo y se espera un segundo evento con la colaboración de estas entidades y más personas de la comunidad. Se espera que las personas rieguen la voz con el fin de apoyar la conservación ambiental de Puerto Rico.